Día 8: De Taltal a Bahía Inglesa y Vallenar

Día 8: Viernes 19 de Septiembre
Igual que el día previo, la partida fue en dos grupos.
Los de más tarde, los mismos, Chanchis, Muela, Luiggi y Lobito, a los que se sumó Topito que estaba con resaca creo y no quería madrugar.
Los demás, a las 8 ya estábamos partiendo, y yo al menos con el objetivo de encontrar a alguien que me cambiara el neumático, probablemente en Chañaral.

6:50 AM Preparando la partida

Con mi neumático!!

Muela y Ceci despidiéndonos

Así que a comerse los km que fueran necesarios, no tan rápido, y con el neumático un poquito más desinflado, para gastarlo en las partes mejores. Camarón se fue en mi moto, yo en la de él... eternamente agradecida!
Con los primeros rayos de sol ya estábamos en ruta.

Como todos estos lugares, el ascenso desde la playa hasta el  plano es abrupto, este no fue la excepción. Al poco rato la costa se ve a lo lejos, abajo, chiquitita. El camino excelente!
El trayecto hasta Chañaral fue relajado, soleado, sin tráfico, muy rico.Y nos fuimos más o menos juntos, nadie muy apurado.

Camarón en mi moto

Yo esperando encontrar una vulcanización

Brutus

Vampiro

Los Patos

Ronda

Sobrino

Vetu y Veti

Elmer
Los cerros son un espectáculo increíble. 

Basta ver las fotos, tomadas con una cámara nada pro, arriba de una moto sin mucha posibilidad de ajustar ningún parámetro, ni buscar el encuadre, ni revisar la exposición, ni siquiera de enfocar bien, y salen como postal!! Es que en la realidad es así de lindo.

Uno se imagina los cerros emergiendo  de las profundidades en un cataclismo

Llegando a Chañaral estaba Wirito indicándonos que nos saliéramos a la caletera, y más allá, lo que andábamos buscando! una vulcanización abierta!

En realidad no estaba abierta, pero Wirito convenció al encargado de que abriera. Lo habrá hipnotizado?
El diálogo fue más o menos así:

Wirito: buenos días, necesitamos cambiar un neumático
Marcelo: (que así se llamaba el encargado y dueño además): está cerrado, sólo vine a buscar una cosa y me voy
(hay que recordar que era 19 de septiembre)
Wirito: es que es una emergencia! amigo, comprenda! tenemos que llegar a Santiago y venimos en pana!
Además, Wirito estaba con Brutus y Vampiro, osea, eran 3 contra 1, harta presión psicológica.
Marcelo: bueno, por ser usted, traiga el auto
Wirito: eeeeeh... no es un auto, es una moto
Marcelo: ah no! yo no veo motos!
Wirito: No se preocupe, entre todos acá lo hacemos!
Marcelo: (que a esa altura ya se había entregado y no oponía ninguna resistencia) bueno ya poh...

Y así, llegamos con Camarón a la vulcanización El Gringo de Chañaral.
Después supimos que el gringo es su cuñado y que Marcelo le compró su parte, para trabajar solo, y que próximamente comprará una camioneta y tendrá una vulcamóvil.
No podía creer que la solución estuviera tan cerca! Gracias a Topito, Camarón, Wirito, Brutus, Vampiro.
No fue tan fácil como parecía, costó desmontar el neumático y además en mi juego de herramientas, no venía la llave de estrella para soltar los pernos... linda!! BMW no más...
Marcelo encontró la llave y nada, demasiado apretados. Brutus aportó la idea y el tarro de WD40 y se solucionó el problema.
En poco rato el neumático ya estaba puesto, y le digo a Marcelo cuanto le debo (por haberme salvado la vida jajaja) y me dice, que le de una propina no más!!!

Los primeros aprontes

Marcelo, el experto

Resolviendo el problema

Grande Marcelo!! Gracias!!

La selfie con el Marcelo

Yo volví a manejar mi moto, el universo había vuelto a su orden natural.
Nos fuimos a la Copec a reunirnos con los otros, y retomamos la idea de Sobrino de pasar a comer ostiones a una caleta y vivero cerca de Bahía Inglesa.
Todo estaba funcionando a las mil maravillas!

Seguimos camino para cubrir a velocidad normal los 100 Km de camino costero, precioso entre Chañaral y Caldera.
Igual está un poco cambiado, han proliferado las mediaguas en la playa y los cerros, que en realidad son casas de veraneo, no es que viva gente ahí siempre. Se podría decir que son "segundas viviendas" Les van a subir las contribuciones!!

Los últimos Km están muy buenos, con doble pista llegando a Bahía Inglesa, y muchas luminarias alimentadas con paneles solares.

Chao Chañaral!!

Pasamos Caldera, que no ha cambiado nada, y llegamos por un camino horrible por la calamina a la caleta donde se comen los mejores ostiones que he probado en la vida!!

Detención para organizar el tema de los ostiones

Tienen piscinas donde cada uno elige y saca, a $300 cada uno. Una verdadera delicia!
Lo notable es verlos como se mueven a toda velocidad dentro de la piscina, abriendo y cerrando la concha para propulsarse (abstenerse de comentarios idiotas por favor, jajajaja)
Los trillizos estuvieron muy entretenidos con este asunto.

Solo Vampiro abre ostiones y fuma al mismo tiempo!

Gracias Sobrino por traernos a esta picá!!!!

Estuvimos un buen rato y decidimos cambiar de planes y almorzar en Bahía Inglesa, nuevamente en un dato de Elmer que resultó, igual que el de Taltal, extraordinario!
Se llama el Coral y ha reemplazado al Domo, un must de Bahía Inglesa, que ya no funciona. Los que habían salido más tarde ( y que se perdieron los ostiones... jijijiji) ya habían llegado
Amplio, super bien atendido, mientras tomábamos el aperitivo afuera, nos preparaban la comida, cuentas separadas, todo bien hecho y bien servido, a la carta, y éramos 21!! Se pasaron!!

El buen pisquito sauer

Comimos muy rico y seguimos a Vallenar, donde estaba esperándonos Rudy, que no se aguantó seguir más tiempo sin andar en moto, por su lesión en un dedo, hace varios meses ya.
Se fue solo a Vallenar el viernes, para volver con nosotros el Sábado a Santiago.
Después de almorzar, algunos volvimos altiro. Los chanchis, muela, Lobito, Luiggi y Vetu salieron a caminar un rato antes de seguir.

Saliendo de Bahía Inglesa

Teníamos que parar en Copiapó a echar bencina.

Antes de llegar a Copiapó hay un by pass para saltárselo y seguir al sur.
En la disyuntiva, Camarón siguió solo por el by pass y el resto entramos a Copiapó.

Caos vial,por dónde seguir?

El camino hasta Vallenar, super lindo con una sinopsis de ese fenómeno tan curioso que es el desierto florido a los lados, y que más al sur está en todo su esplendor.
Llegando a Vallenar ya nos habíamos separado, pero todos dimos con el hotel reservado.
Un hotel nuevito, en marcha blanca que todavía no se inauguraba oficialmente. Las habitaciones y los baños excelentes! Con estacionamiento cerrado para las motos, 10 puntos! inesperado para Vallenar. Nos explicaba el dueño que es buen negocio porque las grandes compañías pagan por períodos largos de tiempo las habitaciones, para asegurar la disponibilidad, entonces no dependen del turismo en realidad. Su nicho de negocios es otro.

El Rudy, estaba esperándonos

Después de acomodarnos y ducharnos, salimos un rato a pasear, eventualmente comer algo y empezar a despedirnos de esta aventura que ya estaba terminando.

Bancos en las veredas de inspiración Gaudiana

Notable el Sexybar, en los altos de la electrónica Atacama

A día siguiente, ya estaríamos de vuelta en las casas y este viaje empezaría a ser recuerdo.

PP  y Leo para Cualtaco