viernes, 7 de enero de 2022

Primer paseo de 2022, micro paseo a Portillo.

 Había que recibir el nuevo año subiéndonos a las motos! No podía ser de otra manera...

Hablamos con Ojitos el 1 de Enero para saludarnos, desearnos lo mejor para este 2022, y barajar la posibilidad de hacer una vuelta corta a algún sitio el Domingo en la mañana. Se pensó y se hizo! Lo más adecuado era una vuelta a Portillo a tomar un café, y a la bajada quedarnos en las empanadas de Chacabuco l@s que pudiéramos junto a los que se sumaran solo a las empanadas.

Así las cosas, y para alcanzar a ir y volver a Portillo, se propuso juntarnos a las 9:30 para salir a las 10 de CoChi. Los confirmados éramos Ojitos y yo jajajajajaja.

Más tarde confirmó Camarón.

Así que en el primer domingo de 2022, y segundo día del año, nos juntamos en CoChi Ojitos, los Vetus, el Wiro el Mamón y yo. Yo les di los abrazos de Año Nuevo, ya que no pude participar de la comida a lo Cualtaco el 31 en la noche donde el Mamón, en la que si habían participado ell@s.

Camarón no llegó a la hora propuesta, así  que a las 10:15 partimos. Antes, Ojitos había dicho que el tenía que volver a su casa a las 12:30-13:00, así que se volvería antes de llegar a Portillo. Por lo mismo, dado que queríamos volver a las empanadas a una hora prudente para comer las delicias antes que se llenara, decidimos volver con Ojitos, cuando el lo decidiera.

El día , como buen día de verano, estaba despejado y se anticipaba caluroso. Nos fuimos por Los Libertadores, más o menos en fila. Bien poco tráfico, rico para el paseo en dos ruedas. Incluso, ya en el camino a Portillo, estaba bastante expedito. Cada tanto había que adelantar algún grupo de vehículos detrás de un camión.

Para mi fue novedad el pavimento rojo antideslizante en algunas curvas y en algunas zonas más pobladas. Lo que no me esperaba para nada es que hubiera lomos de toro y el primero me lo comí entero sin alcanzar siquiera a frenar, ya que la pintura se ha ido saliendo, y no se notan mucho. Por suerte no iba tán rápido, pero igual volé, jajajajajaja.

Avanzamos entre los cerros hasta la Copec de Saladillo, donde nos reunimos para, por la hora,  volver a Santiago.




De vuelta había mucho más tráfico, sobretodo de camiones. A lo mejor el paso Los Libertadores ya está más abierto al transporte de carga. Mamón se paletió y me esperó cuando me tranqué después de un camión, para que no me viniera sola

Ojitos y el Wiro siguieron a Santiago a sus casas y con los Vetus y el Mamón nos fuimos a las empanadas.

Ya había harta gente y agarramos la última mesa disponible al aire libre. Al rato llegaron Camarón con la Arepa. 

Nos trajeron  las empanadas que estaban buenísimas, y las bebidas. Siempre la conversa es entretenida. Al rato llegó el Topo, que solo venía a tomarse algo y a juntarse on nosotr@s.




El calor de la tarde de verano ya se dejaba sentir, había gente esperando mesa, así  que decidimos volver. Yo tenía un compromiso familiar, Mamón tenía que llevar las empanadas a su casa, y el Topo y Camarón tenían ganas de ir a alguna Copec a tomarse un café. No supe si lo hicieron.

Paseo más testimonial que propiamente un paseo, pero se cumplió el objetivo de partir el año andando en moto. Algo así como un buen augurio de muchos paseos por venir!!





FELIZ AÑO 2022 A TOD@S!!