sábado, 21 de julio de 2018

Paseo Invernal a Purocampo en San Felipe

Esta semana ha sido particularmente helada, con mínimas bajo cero casi todos los días, uno que otro chubasco y máximas que no pasan los 12 grados.
Y eso no solo enfría el ambiente, sino que el espíritu para salir a motear.
Como que da un poco de lata salir temprano a pasar frío.
Pero las ganas de andar en moto fueron más fuertes, y ayer propuse que fuéramos a algún lugar cerca, como para salir más tarde, no con toda la helada de la mañana.
La propuesta inicial fue el Parque Chino en Limache, por La Dormida, pero Vitrola advirtió sobre la posibilidad de hielo, por lo que cambiamos el destino a La Palmera en Putaendo. Pero el Topo sugirió otro donde se comía mejor,  que no se acordaba del nombre, pero dio las coordenadas y Camarón y Vampiro comentaron   que se refería al Purocampo en San Felipe.
La junta era a las 11 en Co Chi, para salir en cuanto llegaran todos los que habían confirmado: Camarón y Marcella, Rudy, Ojitos, Vitrola y el Topo.
El mismo día en la mañana confirmaron los Vetus, al mismo tiempo que Vitrola se excusaba de asistir por motivos de trabajo.
Supongo que hablo por todos cuando digo que nos abrigamos como para los 6° que habría a las 10AM. 
Con todas las capas que me había puesto, hasta un poco de calor me dio sacando la moto del estacionamiento.
Partimos con Camarón y la Marcella, por la Costanera Norte y La Pirámide, hacia Los Libertadores.
Qué cosa más rica la sensación de aire fresco pero sin frío. El día estaba soleado con algunas nubes.


Llegamos a CoChi, y ya estaban los Vetus, y el Topo con polola/copiloto. Ella se llama Juliette, y es muy simpática, e integrada. En vista de esto, al Topo habría que rebautizarlo y decirle Romeo... o no? 

Romeo y Juliette

Ojitos en otra mesa, con un cafecito y medialunas.

Luego llegó Rudy.

Como era tan cerca donde íbamos, no nos preocupamos de la hora de salida, la Veti se tentó con un café con medialunas que parece que estaban muy buenas.
Por lo mismo, no sé muy bien a qué hora habremos partido. 

El día estaba exquisito, a esa hora nada de frío, hasta diría un poquito de calor a las 12, con el sol sobre la fila de motos.

En el camino, algunos arreglos, parece que están haciendo un nuevo trébol, osea, mejorando la autopista.
Yo soy totalmente partidaria a las concesiones que permiten que tengamos caminos tan buenos y confiables en Chile. Rara vez se pasa susto por algún problema en las carreteras. 

Avanzamos más o menos juntos. Pude ver los parronales cubiertos con algún tipo de malla o tela aislante, supongo que para protegerlas de las heladas.
El espectáculo de la cordillera nevada es único, especialmente con los campos y bermas verdes cubiertas de pasto después de las lluvias.




Yo juraba que nos iríamos por Auco y Rinconada hasta San Felipe. Pero no, cuando llegamos al desvío, un par de motos estaban más allá, detenidos en la berma. Camarón había seguido de largo. Pero no era que se había equivocado, todo lo contrario. Nos llevó por la autopista nueva que va a San Esteban, a San Felipe y a la 5 norte, la R 57 creo que es.




Un acierto! que camino más agradable, y todavía sin tráfico!!
Pudimos ver una grúa sacando un auto que se había caído al terreno más bajo que el camino.

Tenía cara de que el conductor, por razones que se investigan, habría perdido el control del móvil, como diría un carabinero. O de un curao que se le perdió el camino y se cayó al hoyo como diría yo.
La foto no es de lo mejor, pero algo se alcanza a apreciar. Es que Camarón tenía que haber ido más lento para que la Marcella pudiera sacarla mejor.
Así que a San Felipe llegamos por otro lado, cruzamos el centro, por la calle principal, con la plaza al medio. 
Harto taco si, nos anduvimos disgregando. 


Pero más adelante, retomamos un mejor ritmo.
Salimos de San Felipe hacia Putaendo, pero doblamos en el puente a la izquierda, en vez de seguir derecho.


Camarón se sabía bien el camino. Yo he ido 2 o 3 veces, con GPS, pero no podría llegar sola.
Además hay unos cartelitos cada tanto, indicando por donde seguir hacia Purocampo.





Y llegamos. A las 13:05. Pero estaba cerrado!! No lo podíamos creer!
Tendríamos que ir a La Palmera no más. 

Como no nos resignábamos, no nos íbamos. Yo empecé a dar vuelta la moto para devolvernos.
Ojitos le preguntó a unas personas de una casa contigua qué onda con el Purocampo, pero no le pudieron dar una respuesta concluyente. Estos son más desordenados e impredecibles que Cualtaco.
La Marcella intentó llamar por teléfono. Yo a la distancia además escuchaba a Ojitos parece gritar ese típico "aloooo", cuando no hay timbre y uno no sabe si hay gente o no jajajajajaja.







En eso estábamos cuando, efectivamente, salió alguien a abrirnos.
Es que abren a la 1. Pero ya era pasada esa hora... pero bueno. Hay que saberlo, si está cerrado, hay que puro esperar, porque en algún momento abren.

Entramos por esa entrada maldita de piedras redondas y resbalosas, con una especie de acceso de madera con vigas medias rotas.

Estacionamos, siendo los únicos en el amplísimo terreno.


Adentro, en el comedor, estaba bien helado, así que luego de ubicarnos en nuestra mesa, de haber pedido los pisco sours, y de haber saboreado el pan con pebre que estaba delicioso,  nos fuimos al jardín, al sol, donde estaba realmente agradable.

Nos llevaron los aperitivos para allá, mientras manteníamos un entretenido debate acerca de la maldad como atributo inherente al ser humano.




Después nos fuimos a las 3 sillas de balancín, que tienen la particularidad de colgar todas de un arco de fierro común. En la foto se ve medio doblado... no estaba así antes que nos sentáramos nosotros jajajajaja.
Aquí el fierro está derechito

Aquí también...


Aquí no!!!!!

En cuanto los platos estuvieron servido, nos fuimos al comedor. 
Ahí todos calladitos. La comida estaba muy buena. Y los postres ídem.
Pero tuvimos tiempo para ir planeando las actividades ahora que Camarón cierra el garage y tendrá mucho tiempo libre. Se propusieron almuerzos los viernes, paseos los lunes para puro sacar pica a los que trabajan, viajes largos 2 o 3 veces al año.
Tal como era la expectativa, a las 15:30 ya estábamos casi listos para volver y llegar a buena hora, antes de que helara en la tarde.


Camarón andaba sin bencina (no echó en la mañana), así que pasamos a una bomba a que cargara.





Nos vinimos más o menos ordenados hasta antes de Auco, donde es difícil adelantar y nos separamos.
Pero después de cada peaje nos reagrupamos.


Ya en Los Libertadores, más cerca de CoChi, iba adelantando un camión con acoplado y miles de ruedas, cuando de improviso escucho una explosión, y acto seguido veo una humareda por el espejo. Como que con el ruido salté pero no sentí miedo, más bien sorpresa. Y no supe lo que había sido. Camarón con la Marcella y los Vetus que venían atrás, me dijeron que había sido un reventón de neumático, y ellos lo pudieron ver.
Compartimos la carretera durante algunos minutos con un grupo de Porsches más o menos nuevos, que iban muy muy rápido, y mejor era dejarlos pasar.


Seguimos camino a Santiago, los Vetus solos adelante, yo con Camarón y el Rudy, que vivimos cerca y Ojitos con el Topo que también son vecinos, más atrás.
Qué paseo más bueno, más entretenido, y sin frío!!
Qué bueno que el pronóstico se haya equivocado!!
Bienvenida Juliette! espero que participen de muchos paseos en el futuro.
Hasta el próximo!


Para Cualtaco, Pinpon en el relato y la Marcella en las fotos