Con todo, el camino igual me gustó más. Sobretodo la parte de un camino estrecho en medio de campos que ya están verdes en esta época.
Melon y Melame |
Melon y Melame |
Muchas coincidencias favorables se dieron para que hoy presentara en sociedad mi nueva joyita, que llegó sin buscarla y que me tiene chocha chocha.
Es bajita, llego al suelo sin problemas, tiene un motorazo, es muy suave y casi me parece que es más fácil de manejar. Solo falta ponerle un alzador del manubrio para no ir tan agachada y quedar más cómoda en viajes largas.
Capítulo aparte fue el show de sacar el TAG. Como no pude hacerlo, básicamente porque fui en el horario indicado en la pagina web, llegué media hora antes y ya habían cerrado. Reclamé a Linea Directa de El Mercurio, como en los viejos tiempos, y de la autopista me respondieron que mirara la página web, que ahí se indicaban los horarios... broma!
Dado lo anterior salí con pase diario. No me animé a salir ilegal sin la patente y solo con la factura como me insistió Camarón. El único detalle es que el permiso diario no sirve para la Radial Nororiente... así no más ... un ejemplo de preocupación por el usuario.
Me levanté temprano, demasiado temprano, y llegué a Cochi con media hora de anticipación. El plan era juntarnos ahí, y hacer la ruta Los Libertadores, de ahí por la 57 hasta LlayLlay y de ahí a Nogales y Rungue que es el nombre de la localidad donde está el restorán que al parecer, logró sobrevivir a dos temporadas prácticamente cerrado por los confinamientos y las restricciones en los aforos, producto de la pandemia.
Al poco rato llegó Camarón con la Arepa, Pancho, Wirito, Mamón, el Topo, Spoiler, y el Brujo con la Cristina. Se juntaron 9 motos y 11 participantes. La Copec estaba llena, colapsada diría yo. Con autos y también con motos. Había un grupo grande la mayoría BMW grandes, estacionadas donde nos ponemos normalmente nosotr@s, detrás de los conos.
Yo iba super nerviosa, manejando la moto por primera vez por más de 5 Km seguidos. Aún sin familiarizarme con los miles de símbolos y funciones del manillar y de la pantalla.
Obviamente se hicieron dos o más grupos, los que van más rápido, los que paran a fumar, los que se adelantan, y yo, que no me atrevía a sacarle mas de 110 a la joyita jajajajaja.
El día estaba despejado pero fresco, primaveral total. La idea era salir bien temprano para evitar los tacos, y la cola en el restorán. Camarón, uno de los autores intelectuales de mi nueva adquisición fue casi todo el camino, cerca de mi. Entre otras cosas porque habíamos quedado en que ellos me pagarían el peaje para no demorarme tanto.
Los Libertadores estaba con poco tráfico, lo que es siempre un agrado. Avanzamos más o menos rápido, mientras yo me iba acomodando en la máquina nueva y desconocida, paradigma de la tecnología de punta de estos tiempos.
Llegamos al final de Los Libertadores, en el puerto terrestre y empalmamos con la ruta 57. Recién inaugurada, es autopista era un lujo que atravesaba campos de la zona, alejada de los pueblos y poblados. Ya no es así. Igual que en la antigüedad, cuando en cada lugar donde había un río surgía un asentamiento humano, ahora, sucede lo mismo con los caminos y las autopistas. Han ido apareciendo conjuntos habitacionales que verán en la autopista una oportunidad de conectividad y plusvalia.
Llegamos a LlayLlay al peaje que estaba bastante concurrido. Nos reunimos a la salida de las casetas de cobro. Ibamos de lo más bien a buen ritmo y buena hora.De ahí, a La Calera y la salida a la cuesta Nogales.
Spoiler, que maneja información privilegiada, nos advirtió de las obras que hay en la cuesta, con alto trafico de camiones, que desparraman tierra en la calzada, lo que afecta la adherencia de los neumáticos. Así que yo al menos, iba muy atenta y alerta a esa situación. En efecto, las obras son monumentales. Me dio la idea de que el plan es hacer un camino de dos pistas por lado en toda la cuesta. Yo creo que quedará super mega bueno!
Pero el camino estaba mas bien despejado, y limpio. En ese tramo nunca fuimos todos juntos. A lo más grupos de tres. Seguimos a Puchuncaví y avanzamos hacia Rungue, el destino final. Los vehículos transitaban a ritmo vacacional.
Llegamos temprano al Caballito de Palo, por lo que no hubo problema ni con el estacionamiento, ni con la mesa.
Pedimos los platos elegidos por cada uno, en un ambiente distendido.
Fue un almuerzo agradable, sin estridencias ni exabruptos, la comida "correcta" como dicen ahora los especialistas para decir que algo estaba bueno. Yo pedí porotos granados, que estaban correctísimos jajajaja.
Terminamos de almorzar temprano, lo que daba tiempo más que suficiente para ir a la casa de Spoiler en Maitencillo a tomar el café. Para allá partimos. La entrada al camino que lleva al condominio sigue siendo terrible. Como para que los invitados nunca lleguen! Había que pasarse para no parar en la calle y te choquen por detrás, ir a dar una vuelta en U en la salida a Marbella creo, devolverse y achuntarle a la entrada que no tiene mayor informacion. Pero igual llegamos. Algo me acordaba, lo suficiente para dar con la entrada al condominio donde está la casa del ministro.
El ministro, muy acogedor, ofrecía café a dos lucas, baño a 3 lucas, dormitorio a 10 lucas.jajajajajaja
Nos instalamos en la terraza, mientras el ministro, la Cristina y yo preparábamos café. Fue un grato y relajante momento, en las reposeras al sol. Camarón propuso volver por ConCon, y otras ideas que no cuajaron. Yo quería volverme por el túnel nuevo, El Melón pero tampoco hubo quorum.
Yo andaba, como recordarán, con el pase diario que no sirve para la radial nororiente, pero quería volverme por ahí y saltarme Vespucio, sus obras viales y sus tacos. Solución, sacar la patente y convertirme en irrastreable, como sentenció Spoiler, experto en el tema. Dicho y hecho, sacamos la patente y problema resuelto.
Al final nos devolvimos por donde nos habíamos ido. Paramos a echar bencina en Puchuncaví, Camarón y Pancho nunca llegaron, así que nos fuimos.
Más juntos que a la ida eso si. Paramos en LlayLlay a despedirnos, donde llegaron Camarón con la Arepa y Pancho. Se separaron del grupo porque la Arepa y Pancho estaban antojados con estar cerca del mar, idealmente en la playa, y se fueron a dar una vuelta a la costanera.
Y calabaza, tod@s a sus casas y a sus vidas, por la Radial.
Rico paseo, buen grupo, buen clima y moto nueva. Qué más se le puede pedir a la vida!!
Hasta el próximo raid!!
PD Cada vez es más difícil tener la foto grupal de la manada de gatos.