miércoles, 1 de febrero de 2023

Vacaciones veraniegas 2023 San Luis, Argentina. Dia 1 Santiago -Mendoza

Ya es habitual organizar viajes en Enero de cada año. Una semana o un poco más. Vampiro propuso este paseo “pulpo”, es decir con base en una ciudad y paseos diarios a localidades de la zona. Esta modalidad es muy buena porque nos quedamos en un solo hotel, y no hay que estar armando y desarmando bolsos ni cargando y descargando la moto cada día. Y se conoce la zona más en profundidad.
Vampi hizo la investigación del caso e ideó este viaje a San Luis, Argentina, con paseos diarios a distintas localidades. Osea seria algo así como Argentina en moto Vol 2.
Espero que perdonen mi total falta de arte y sentido de las proporciones, pero aquí va una interpretación libre del  diagrama de como sería el viaje.


El gran problema de ir a Argentina es la Aduana, ya que puede tomar muchas horas y nunca se sabe cómo estará. Por eso preferimos hacer el primer día solo hasta Mendoza, a pesar de que en kilómetros llegar a San Luis en un día sería lo más normal del mundo.
Quedamos de juntarnos a las 6:30 en el primer teléfono de emergencia de la RCNO.
Yo llegué a las 6:23 cuando todavía estaba oscuro. Al poco rato llegaron los Vampis. Y Camarón no llegaba… A las 6:32 mando un mensaje diciendo que iba saliendo. Resulta que se confundió y pensó que la junta era a las 7. Y llegó a las 7.
El sol ya estaba saliendo y estaba fresco pero no helado. El trayecto hasta el Puerto Terrestre estuvo fácil y fluido. La temperatura había bajado un poco y se sentía más frío. 

Nos encontramos con neblina que dificultaba un poco la visibilidad pero nos vino muy bien, ya que evitaba el sol de frente al ir directo hacia la cordillera.

Una vez que disipó ya estábamos entre los cerros que hacían sombra al sol naciente. Afortunadamente había muy poco tráfico, casi ningún camión, por lo cual avanzamos bastante rápido en el camino hasta Saladillo. No paramos en la bomba, no era necesario. Seguimos el ascenso hacia la cuesta Caracoles, el camino de las 29 curvas hacia el paso fronterizo, que se eleva desde los 800 msnm hasta los 3.200.
No hacía nada de frío el día estaba despejado y soleado. La vista de los cerros enormes y erguidos recortados contra el cielo azul es imponente.

Muy luego ya estábamos en la Laguna del Inca . Cruzamos el Túnel Internacional Cristo Redentor y después el otro, que es más  corto, y que no se como se llama para seguir a la peor parte del camino, la Aduana.
Llegamos a las 9:15 y para nuestra sorpresa y regocijo casi no había cola! Maravilloso e inesperado. En total estuvimos 45 minutos!! Increíble 





Seguimos camino, iniciando el descenso hacia Uspallata. Qué camino más lindo sin tráfico! En esta época está con más vegetación que de costumbre. Nos cruzamos con muchos autos camiones y motos, mucho tráfico hacia Chile 











Llegamos a la YPF de Uspallata que es un lujo. Ya se sentía un poco de calor, que después sería mucho más. 
Nos quedamos un rato ahí, tomando café y bebidas, muy contentos de no haber quedado varados en los trámites administrativos de migración.


Venía la parte más bonita del camino, entre montañas imponentes bordeando el escuálido río Mendoza.
Aquí si nos tocaron un par de tacos detrás de camiones pero se pudo adelantar un poco y tampoco iban tan lento.





Las empresas de rafting son de una perseverancia admirable, a toda prueba. Ahí están convenciendo turistas de lo emocionante que es bajar el río Mendoza en botes Zodiac. Por un río con poca agua, sin mucha corriente, plano y café sin ningún brillo jajajajaja. Pero le ponen color y la gente igual debe pasarlo bien.
Según el Vampi el río iba más caudaloso que la otra vez y el embalse estaba con más agua.

Después del desvío por los arreglos en la entrada a Mendoza pasamos a una YPF que queda yendo a Mendoza, muy poco después del empalme con la Ruta7.


Ahi estaba un motorista cargando bencina, en una moto no muy grande pero que se veía enorme con la cantidad de equipaje que llevaba. Y no era para menos, había partido de Colombia y desde ahí  se iba a Chile. Llenó un bidoncito con el preciado combustible, que nunca debe faltar, porque le dijeron que no habrá mas gasolineras hasta Chile... gente barsa, aprovechándose del pobre hombre. Obviamente que la Sonia se le acercó, le conversó y le sacó todo el rollo.

Camaron nos llevó hacia el centro para ver si encontrábamos alojamiento en algún hotel más o menos bueno y a precio razonable.
Paramos en La Florencia, estacionamos las motos y Camarón fue caminando a averiguar al Carollo y al Princess
Al final nos consiguió habitaciones a buen precio en el Princess. 
El almuerzo estuvo buenísimo todo rico y el mozo que nos atendió, Roberto, un encanto, con la eficiencia que caracteriza a los mozos argentinos.



Después de almuerzo nos fuimos al hotel, estacionamos las motos en el garage, y fuimos a registrarnos.
Camarón había negociado un muy buen precio con el encargado del Hotel Princess, que es conocido de muchos años. Fue la persona que ayudó con los trámites cuando murió Clavito, en un accidente de auto en el camino a Mendoza. Fueron momentos terribles y gracias a él todo anduvo un poco más fluído en medio de la tragedia. Pero cuando llegamos, en la recepción ya no estaba el argentino y estaba otra empleada, que a regañadientes aceptó que nos hubieran hecho precio, y nos dio un valor, que, sin bien estaba rebajado, no era el que nos habían dicho. 
Así que nos hicimos l@s loc@s, nos fuimos a las habitaciones, con la idea de que al otro día en la mañana si estaría el amigo de Camarón y ahí tendríamos el precio definitivo. Informalidad se llama eso.
Nos duchamos para salir a pasear. 
Como nunca fui la primera en estar lista en el lobby, esperando a los demás.
Nos fuimos caminando hacia la Plaza Independencia.
Justo ahí estaba estacionado el Bus Turistico de Mendoza. No lo tenia en mis libros.

A esa hora no había tanta gente por el calor. Las fuentes de agua estaban funcionando, son muy bonitas! Creo que no me había tocado verlas con los chorros de agua alegrando el paseo.


Seguimos por la peatonal hasta San Martín para ir a cambiar dólares donde otro amigo del Camarón.

Cambiamos unos dólares y nos entregaron sendos fajos de billetes de 1000 pesos. Una locura!  En un mes, desde la ultima vez que anduvimos en Mendoza, el peso se ha devaluado 20%.





Camarón que es bueno para cambiar las palabras, en lugar de fajo de billetes decía fardo… aunque quizá en esta ocasión tenía razón jajajajaja.
Nos fuimos a la mesa del Gari en la peatonal y pedimos unos cafés, cerveza y jugo. Esa mesa está al lado de una fuente de agua circular, donde a veces la gente se sienta en el borde. Esta vez la encontramos con agua ROJA... seguramente se debe a la creatividad de alguien con el poder de hacer semejante barbaridad. Se ve chocante y fea, podria haber sido amarilla, o blanca o negra.. pero roja? No entiendo. Parece salsa de tomate.

En esa mesa siempre surgen buenas conversaciones. Esta vez fue la historia del nuevo servicio de internet y cable VTR que contrató Camarón con un nuevo decodificador y su respectivo control remoto, que funciona como Alexa. Osea ,él le habla y le pide cosas y la tele le responde. Aquí no se puede reproducir la conversación que tuvo con la tele porque es muy íntima. Pero los que fuimos seguro nos reiremos al recordarla. Fue hilarante!

En la mesa al lado nuestro había un grupo de gringos, con un inglés muy raro, y un aspecto gringo, pero no norteamericano. Estuvimos haciendo conjeturas acerca de su procedencia.
Cuando se pararon para irse se nos acerca el gringo más viejo, y nos dice “chilenos?” Si! Le respondimos. Nos dice “ reconocí el acento, soy lingüista y estudio los idiomas y los acentos.”
Eran Británicos pero no especificaron de dónde. Claramente no eran ingleses, ni por el acento de ellos ni porque los ingleses dicen que son ingleses, no británicos.
Nos devolvimos al hotel, pasamos por la plaza nuevamente, recorrimos la feria artesanal. Antes l@s artesan@s estaban en sus puestos ofreciendo sus productos, y muchas veces trabajando en su artesanía. Ahora están mirando sus celulares…
A esa hora la plaza estaba muy concurrida, con algunos cabros mojándose en las fuentes de agua.
Llegamos al hotel y nos fuimos a las habitaciones a descansar.
Fue un día excelente!! Sin cola en la Aduana, con poco tráfico, el camino bueno, y el hotel mucho mejor que el que teníamos reservado.
Pero lo mejor este grupo con el que se pasa tan bien!

Vacaciones veraniegas 2023 San Luis, Argentina. Día 2 Mendoza a San Luis

Qué manera de dormir mal en Mendoza! Todo por culpa de un maldito zancudo y su zumbido que me despertó varias veces en la noche. Asi que no estaba en mi mejor versión que digamos. Y con dolor de cabeza a más no poder.
El desayuno en la terraza, estuvo súper bueno, muy variado y todo rico, lo cual siempre es una buena manera de partir el día.



Fuimos a la recepción a arreglar el tema del precio acordado. Estaba el amigo de Camarón y nos respetó el valor del día anterior. Nos despedimos del amigo mendocino y seguimos camino.



El día estaba nublado pero caluroso. El tramo era relativamente corto y pura carretera. Camarón y la Sonia habían andado por estos lugares no hacía mucho, así que había cierta certeza del buen estado de los caminos.



Además no había mucho tráfico. Solo en las cercanías de las localidades en las afueras de Mendoza había un poco más, pero con la doble pista ni se sentía. Además en Argentina se maneja bien, respetan la pista izquierda para adelantar, salvo que haya mucho tráfico. Además dan la pasada en los accesos a las autopistas. A medida que nos alejábamos de Mendoza se disipaban las nubes. 
Hacia San Luis estaba totalmente despejado


Dicho esto, hice lo que casi nunca hago: irme por la izquierda todo el rato, porque en  general el carril derecho está con el pavimento más roto o deformado, por el paso de los camiones.
Al poco rato ya se había despejado y empezó a subir la temperatura. El paisaje era bastante cambiante. Algunas zonas muy secas, pura tierra, y en otras campos verdes con diferentes cultivos. Varias viñas, o bodegas como les dicen por allá.




Nos fuimos muy ordenados a 110 Km/ hr, que era la máxima permitida. Eso fue bueno porque cada tanto había policías medio camuflados, que paraban y multaban a los infractores. Vimos cómo habían parado a dos prepotentes en camionetas gigantes que iban a  140 o más tirándoles el auto a los otros o pegándose al de adelante. Una de esas fui yo. 
Nos contaron que primero hay un policía de civil en cualquier parte midiendo la velocidad y el les avisa a los otros que están con la patrulla y los conos.
Fue muy reconfortante ver como el apuro y la prepotencia no les había servido de mucho jajajajaja!

Eso sí era bastante aburrido en el camino recto, y con el sol pegando fuerte. La Anto y la Sonia iban casi durmiéndose. El calor era bien pesado.

Llegamos a la frontera con San Luis, con control de policía. A nosotr@s siempre nos hacen pasar, no nos preguntan nada.

 

 Un poco más allá del arco característico al entrar a la provincia, está el peaje Desaguadero, donde las motos paga $50 (100 chilenos) y a continuación el control sanitario, que es lo más raro qué hay, un chiste. Un desvIo donde los vehículos en fila avanzan lentamente, y al final,pasan por una especie de aspersor con lo que se supone debe ser un desinfectante, pero todo muy precario.
PEAJE





BARRERA SANITARIA



Poco más adelante empieza otra rareza de la zona: 90 Km de autopista iluminada… sin comentarios.
Aquí anduvimos más rápido, a 140 más o menos porque el calor no se soportaba, llegó a 34º, hasta que entramos a la ciudad de San Luis, capital de la provincia.
En las inmediaciones de muchos pueblos y ciudades hay señalética recordando que Las Malvinas son argentinas... agregando la distancia a la que está esa ciudad o pueblo de las islas plurinacionales. Los vimos acá y también los vimos en el norte en el viaje anterior.




Llegamos a San Luis a las 13:30 .con todo el calor y la ropa mojada, pegada al cuerpo. Estacionamos afuera del hotel sabiendo que todavía no era la hora del check in, pero había que ver si Camarón se quedaba con nosotr@s en el mismo hotel o se buscaba otro ya que iba sin reserva.
La encargada se hacía harto lío con todo, estaba terminando su turno y le llega la avalancha de gente muerta de calor, y sobre la misma otra familia como de 5 personas.
El caos era máximo. Además había que pagar al hacer el check in, y al menos Camarón y yo pagábamos con billetes. Con el cerro de billetes que habíamos cambiado.
Había que contarlos y revisarlos en la máquina ad hoc como las que hay en los bancos y casas de cambio. Finalmente el caos se organizó y nos entregaron las habitaciones, y Camarón se quedó con nosotr@s.

El único detalle fue que con el Vampi nos equivocamos con la reserva en Booking y pusimos un día menos... Nadie es perfecto dicen... Pero no fue problema agregar una noche mas a la estadía.El hotel era mas penca que lo que yo recordaba del viaje a Foz, pero tenía buena piscina. Con esta foto, los que fueron a Foz, se van a acordar jajajajaja.

Nos cambiamos ropa y partimos al 4Reinas, recomendación de Camarón,  que quedaba al frente del hotel.


La atención fue un poco lenta (yo encuentro milagroso que con ese calor alguien cocine, o mas aun que se mueva), pero las cervezas y el entusiasmo del viaje hacían que nada importara demasiado. La comida fue muy abundante y yo la encontré rica, en especial las rabas con alioli.
Al Vampi le tocó hacer las cuentas.

El postre fue en la Heladería Grido, la misma de Chilecito, que es buenísima, y quedaba al lado del hotel.





Después del almuerzo nos fuimos directo a la piscina a refrescarnos. Nos adueñamos de la piscina de niños, y ahi nos quedamos en el agüita conversando. La Sonia había ido a la piscina con ropa. Al vernos a tod@s en el agua, rápidamente fue a cambiarse y se nos unió en la sobremesa acuática.



Al rato llegó una pareja de argentinos, que nos metieron conversa hablando del pisco, y se hicieron un hueco en nuestra piscina privada. Yo ya tenía un poquitín de frio asi que fui a ducharme y vestirme. L@s demás se quedaron socializando con la pareja.

Mas tarde los Vampis, fieles a su costumbre, se cambiaron y salieron a recorrer. 
Solo ellos tenían una reserva de pilas. Camarón la Sonia y yo optamos por el descanso mental, pero sobre todo, físico.