En contraste con la noche anterior, dormí super mega bien, casi 9 horas de corrido. En parte porque la hora de salida era las 11 ya que el lugar no quedaba tan lejos.
Tan bien dormí que ni sentí la lluvia que hubo en la noche, que fue bastante fuerte.
El Vampi se las mandó con el diseño de este viaje. Súper bien elegidos los paseos por el día.
Como a las 10 tomamos desayuno (reguleque no más), y a esa hora también llovió un poco. Justo esa noche las motos no quedaron bajo techo. Pero la lluvia fue tan intensa que quedaron limpiecitas jajajajaja
Partimos cerca de las 11 a echar bencina. Como era domingo, había muy poca gente en las calles.
Pasamos por muchas esquinas inundadas, con agua corriendo por las calles en gran cantidad, de lado a lado. En alguna dejé que Camarón pasara primero para ver la dificultad. El problema del agua en esa cantidad es que no se ven los hoyos, y por donde andábamos las calles no eran de lo mejor precisamente, así que era para asustarse un poco.
Pasamos por muchas esquinas inundadas, con agua corriendo por las calles en gran cantidad, de lado a lado. En alguna dejé que Camarón pasara primero para ver la dificultad. El problema del agua en esa cantidad es que no se ven los hoyos, y por donde andábamos las calles no eran de lo mejor precisamente, así que era para asustarse un poco.
Nos dirigimos hacia los cerros, y entramos en una cuesta preciosa. Seguía con hartas nubes pero rica temperatura, 21º registraba el marcador.
Todo el camino muy verde, con vegetación muy frondosa, casi selvático. curvas súper buenas, un agrado.
Paramos en un mirador desde donde se apreciaba el valle, la ciudad de San Luis y la cuesta serpenteante. Las nubes agregaban un toque dramático al paisaje.
Había una estructura de cemento imitando un marco de fotos, precisamente para eso, para sacarse la foto con el magnífico fondo del valle.
Tod@s hicimos lo propio y posamos para las fotos del recuerdo. La mejor fue la de Camarón con la Sonia, volando cual Superman y Luisa Lane, evidentemente que guardando todas las proporciones.
Camarón no perdió oportunidad de dejar un sticker de Cualtaco. Sería choro hacer una publicación con los lugares donde ha quedado uno, testigo de que por ahí anduvo la manada de gatos.
Tod@s hicimos lo propio y posamos para las fotos del recuerdo. La mejor fue la de Camarón con la Sonia, volando cual Superman y Luisa Lane, evidentemente que guardando todas las proporciones.
Camarón no perdió oportunidad de dejar un sticker de Cualtaco. Sería choro hacer una publicación con los lugares donde ha quedado uno, testigo de que por ahí anduvo la manada de gatos.
Seguimos camino. La bajada tanto o mas agradable que la subida. Antes de llegar al destino pasamos por varios poblados con casas como de campo re buenas, se notaba que era un zona de alto poder adquisitivo.
Finalmente llegamos al lago y al pueblo construido alrededor del lago y de la pista de carreras de autos. La población es de 1700 habitantes, y ha crecido exponencialmente en los últimos años.
La pista actualmente se llama Avenida del Circuito y mide 6.250 m. En ella se realizan carreras de diferentes categorías.
Potrero de los Funes también es la Capital Nacional del Ajedrez.
A orillas del lago, que en rigor es un embalse, está un hotel a todo trapo, que cuenta con habitaciones a ras de agua, como si fueran flotantes. De hecho, deben serlo. No lo encontramos tan caro, ($145.000 la noche) para lo que es.
Camaron con las motos |
En las laderas de los cerros se ven verdaderas mansiones, enormes, imponentes. De que hay plata, hay plata.
Paramos en un sitio que nos tincó, El Mirador del Lago. Llegamos justo! Al poco rato estaba lleno. La garzona que nos atendió muy simpática y amable. La comida súper buena y barata! Un bife chorizo, con ensalada, postre y bebida, menos de 7 Lucas chilenas. BBB
Después de almuerzo, tod@s menos uno ✋ fuimos a caminar buscando una feria artesanal. No la encontramos pero compramos imanes en una tienda tipo bazar.
Volvimos a San Luis por otro camino, menos de 20 Km de recorrido.
Llegamos al hotel y nos fuimos a la piscina. Muy agradable, hacía harto calor y el agua no estaba tan fría. Nos instalamos en la piscina de los niños, estaba muy agradable y refrescante.
Como a las 20 salimos a caminar. Camarón y la Sonia se fueron al casino. Con los Vampis fuimos a la plaza, donde está la catedral. Después de eso fuimos a comer a las 4 Reinas. Una de las calles de la plaza se llama Pringles, como las papas. Después fuimos cayendo en la cuenta de que Pringles es el apellido de un prócer de la zona, del siglo XVIII
Después nos fuimos al hotel. Me quedé pegada viendo al Bombo Fica en el Festival del Huaso de Olmué. Lo estaban dando en directo en un canal internacional que se transmite en San Luis. Qué tal?
Me dormí mucho más tarde de lo que hubiera tenido que hacerlo pero valió la pena. Yo me río mucho con el Bombo Fica.
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