Era el último día del viaje a Uyuni, verdadero hito en la vida de cualquier motorista.
Cargamos la motos y a las 10 ya estábamos en camino.
Nos fuimos por la Avenida del Mar hasta donde termina, desde donde se aprecian la Mezquita de Coquimbo y la Cruz del tercer Milenio, figuras icónicas en el paisaje Coquimbano.
Paramos a la Copec de la salida de Coquimbo a echar bencina y seguimos hacia Santiago.
A la altura de Talinay volvió a salir el sol, ya casi no había nubes, lo cual acentúa mucho la belleza del paisaje y las fotos.
Pasamos por el Parque Eólico Talinay, con 45 aerogeneradores y luego por el de Canela, con 40 de estas torres gigantes con sus aspas. Entre los dos aportan 150 MW, nada despreciable.
Poco antes de Huentelauquén están construyendo por fin un trébol para el camino a Illapel. Claro que mientras tanto, es un poco un caos.
En Los Vilos volvimos parar para echar bencina y eventualmente despedirnos, ya que de ahí en adelante nadie espera a nadie y cada uno tiene su propia ruta jajajaja.
Creo que Paparazzi y la Margarita prefirieron hacer una parada más larga y almorzar.
Ya no quedaba nada. Los tramos con sol se alternaban con otros bien nublados.
La entrada a Santiago estuvo fácil . Con Camarón nos fuimos por la Radial Nororiente y llegamos a la casa como a las 5.
Y se terminó.
Otra gran experiencia, otro viaje en moto con amigos, inolvidable!!
Gracias por la compañía , la buena onda, la ayuda, las risas.
2019 ha sido un gran año, con mucho Km. recorridos, en Estados Unidos, Huasco y Bolivia y el Norte grande y Argentina.
Espero que siga igual por muchos años más.
Un gran abrazo a cada un@ de los que hicieron posible esta aventura.
Fue muy raro escribir las publicaciones de este viaje. El paseo fue en Septiembre. Cada capitulo toma muchas horas viendo fotos y construyendo los textos. Y ocurrió que estaba en la mitad del trabajo cuando vino el estallido social en Chile que nos tiene patas parriba hasta ahora. Tuvimos la suerte de estar en Iquique, Antofagasta y La Serena antes que fueran parcialmente destruidas, arrasadas y quemadas. Cuando todavía se podía decir que en Chile, con todos sus problemas, se vivía en tranquilidad y progreso y que éramos distintos al resto de la región. Y aquí estamos, atravesando la peor crisis de los últimos 40 años y sin una salida pronta ni clara.
ResponderEliminarAsí que todos los elogios a nuestro hermoso y querido Chile en cada capítulo tienen la validez que podían tener antes del 18 de Octubre. Ahora todo está cuestionado y es incierto, y las ciudades tienen las huellas del conflicto que atravesamos. Pero yo sigo pensando que tenemos un gran país y que deberíamos salir fortalecidos de esta. Con más conciencia, mas justicia y más igualdad. Amén
Muy buen relato, me entretuve mucho
ResponderEliminar