Noroeste argentino en Halloween Dia 10. De Mendoza a Santiago

Fin de viaje. Obviamente el tema del día era la aduana y la mejor hora para pasarla sin demasiada espera. Eso siempre es una apuesta, pero poniendo todo en la balanza, pensamos que saliendo a las 10 de Mendoza no deberíamos tener mayor problema... y si lo teníamos, filo, aperrar no más.

Como a las 9:30 se registró un temblor grado 5,2. La Margarita lo sintió y pasó un susto.

Yo no sentí nada, no sé los demás.

Tomamos desayuno que la misma mujer que cobraba el dia antes servia en el comedor. Muy básico es mucho decir. El comedor estaba lleno con lo que parecía ser un grupo en algún programa turístico de adultos mayores. (no se aceptan ironías ni comentarios jajajajaja)

La idea era salir a las 10. Después del desayuno fuimos al estacionamiento a buscar las motos para cargarlas en la calle al frente del hotel, y no acarrear los bolsos la cuadra y media que había que caminar.

Camarón fue a la San Martín a cambiar plata para los últimos gastos. Entretanto llegaron los Paparazzis que estaban en otro sitio alojando.

Finalmente, como a las 10:30, partimos rumbo a Chile

Paparazzi nos llevó a una YPF antes de la salida a la Ruta 7. Ahí nos tocó esperar al lado de un auto, más bien viejo  no tan cacharriento con un parlante como los antiguos de casa, esos que eran una caja de madera negra, instalado en el techo, atado con unas correas que entraban por los marcos de las puertas, sujetando el artefacto. Se veía que era como para poner la música a todo volumen, como para una fiesta al aire libre. La creatividad a tope jajajajajaja.

Cargamos los estanques y seguimos hacia Uspallata. El camino con poco tráfico, lo encontré mas o menos no más. Bien disparejo a ratos, y deformado en varias partes. Eso si que anunciado con bastante anticipación, para no caer de improviso en una trampa potencialmente peligrosa. Paparazzi y Camarón se fueron adelante. El Vampi me acompañó todo el trayecto.

Llegamos a la YPF nueva, a la salida de Uspallata hacia Chile. Donde había parado con los Huesos, que me acompañaron el primer día. Un lujo!! linda, espaciosa, cómoda, realmente agradable quedarse ahí un rato a tomar algo.

Al rato seguimos al cruce fronterizo. El camino pasable, algunas partes muy deterioradas, pero sin viento a esa hora, y sin calor.

A las 14:30 llegamos a la Aduana. Demoramos una hora y media en todo el trámite. Bastante decente. 

El problema de esa instalación es que los módulos de atención quedan en altura, y se accede a ellos por una rampa, con una inclinación nada despreciable. Para las motos, eso es fatal, porque si quedas en la cola en la mitad de la rampa, tienes que partir en subida, con harta pendiente. Yo esperé que se despejara un poco para hacer toda la subida de una, pero igual no quedé en plano. Camarón me ayudó con el ultimo tramo.

Paparazzi en cambio, mucho mas sabio, practico, y con una perso déganta de un argentino, esperó pacientemente abajo, antes de la subida, hasta que se despejó completamente. Totalmente ajeno a lo que pudieran pensar los de la cola atrás de él, al ver que no avanzaba. Buena lección para una próxima vez. Si es que hay próxima vez. Al Noroeste de Argentina es mejor ir en auto. Los caminos están muy malos. Por lo menos para mi en mi moto.

A los Paparazzis les pidieron el carnet de vacunas! WTF!!

Después vino el SAG. Yo miraba aterrorizada como los hacían sacar y abrir cada bolso!! Osea tenia que desamarrar el mio con todo lo que costaba, y volver a amarrarlo, con lo que costaba y el tiempo que tomaba! Pero por suerte me perdonaron, no tuve que sacar el bolso, solo abrir las maletas laterales.

Bajamos Caracoles con poco tráfico, esquivando los hoyos .

Pasamos a la Copec a echar bencina donde atienden unas chica muy simpáticas, extranjeras, con una de las cuales la Sonia entabló una animada conversación con muchas risas. 

Calculé que el precio de la bencina era el doble que en Argentina.

Cuando llegamos a Los Libertadores empezamos a ir a 120 Km/hr. Yo sentía que iba a 200, después de 10 dias andando a 80 jajajajajaja.

Un gran gran viaje!! Como siempre! Conocimos parajes hermosísimos, hicimos las dos cuestas icónicas de la región (Las Cornisas y Miranda), comimos rico, nos reímos mucho, aunque echamos mucho de menos a Paparazzi y la Margarita cada dia.

Otro maravillosos periplo para las crónicas  de Cualtaco!!